Marine Le Pen anuncia que votará en blanco en la segunda vuelta.

"Yo no me dejaría engañar por los espejismos”, dice ante los suyos

Sarkozy vuelve a atacar a Zapatero por no haber hecho “las reformas necesarias”

Ni Hollande ni Sarkozy. Marine Le Pen ha revelado hoy que votará en blanco el domingo y ha aconsejado a sus 6,5 millones de electores que elijan “en conciencia” en la segunda vuelta de las elecciones: “A título personal, yo no me dejaría engañar por los espejismos”, ha afirmado, sugiriendo a los suyos que den la espalda al socialista François Hollande y al presidente Nicolas Sarkozy.

Le Pen ha afirmado que el Frente Nacional es “el centro de gravedad y la brújula de la política francesa”, ha denostado “las mentiras y traiciones del sistema ultraliberal UMPS” –fusión de la UMP y el PS, que llevan, ha dicho “30 años haciendo perder a Francia”, y ha denigrado los intentos de los dos candidatos por captar los votos de sus electores: “Sois ciudadanos libres y votaréis según vuestra sensibilidad, pero yo no daré mi confianza a ninguno de ellos. El domingo votaré en blanco y en junio bleu Marine”.

Cerrando el mitin que festeja el 600 aniversario de Juana de Arco, bajo la estatua dorada de la legendaria patriota, la líder del Frente Nacional ha hablado durante una hora ante unas 5.000 personas enfervorizadas en la plaza de la Ópera. Ha repasado su programa electoral, y ha denostado sin tregua a Sarkozy y a Hollande como dos caras de un mismo pensamiento ultraliberal, europeísta y favorable a la inmigración.

Sobre Hollande ha dicho que “la izquierda ha abandonado sin vergüenza a los más pequeños, a los excluidos”. Y sobre Sarkozy, ha ridiculizado su intento de “travestirse en el candidato del pueblo después de cortejar sin pudor a las élites mundiales, de haber hecho explotar la inmigración, destruido y precarizado millones de los empleos, defendido el poder de los bancos y el dinero y renunciado a la soberanía nacional. Un hombre así no puede ser el presidente del pueblo”.

Entre pancartas de “Marine Presidente” y "Sarkozy lárgate”, el mitin será histórico para la extrema derecha francesa porque Le Pen ha aprovechado para liquidar el viejo Frente Nacional en presencia de su padre, Jean-Marie Le Pen, al lanzar su candidatura a las legislativas de junio anunciando que concurrirá como líder de una formación llamada “Rassemblement Bleu Marine”.


Nuevas críticas de Sarkozy a España


Mientras los sindicatos celebran como siempre el Primero de Mayo con una manifestación que desemboca en la plaza de la Bastilla, Sarkozy ha decidido politizar la fiesta del trabajo y convertirla en un acto electoral. Tras criticar a los sindicatos y a la izquierda por querer apropiarse del valor del trabajo, el presidente ha convocado a los militantes de la UMP en la explanada de Trocadero, junto a la torre Eiffel, donde dará un discurso a las 15.30.

Antes, en una entrevista a la radio, el presidente saliente ha continuado su cortejo a los votantes del Frente Nacional, y ha dicho que “hay demasiados inmigrantes en Francia”, y que el voto a la ultraderecha es “un voto de crisis pero también de adhesión (a su líder)”.

Un día más, Sarkozy también ha atacado, sin nombrarlo, al último Gobierno socialista español, y le ha acusado implícitamente de haber dejado al país en una situación límite: “Salvar a España es un problema de los españoles. Tienen que hacer las reformas que no han hecho hasta ahora”, ha indicado Sarkozy en una entrevista a la radio RMC. Y ha añadido: “Europa no puede dejar caer a España. La deflagración sería catastrófica" para el resto de los Estados de la Unión Europea y en concreto para Francia”.

Sarkozy ha concluido que “el primer esfuerzo consiste en que el Gobierno de Mariano Rajoy tome las decisiones que tenga que tomar, en relación con la reducción del déficit, con la competitividad de la economía".


EXTRAÍDO DE:  EL PAÍS