Aquí vemos otra despreciable muestra de racismo. Sí, Racismo con mayúsculas. Ese racismo incómodo que los siervos del capital, -con y sin corbata- se emplean tanto en esconder o hacer oídos sordos de una manera un tanto cruel.
Para el mundo, el racismo se limita, desgraciadamente, a el desprecio verbal, actitudinal o físico de una persona blanca hacia cualquier otra persona perteneciente a otra raza. Pero de lo que se olvidan es de que cualquier otra persona que sea negra, china, sudamericana, etc puede despreciar a una persona blanca, solo que esta vez la víctima no será apoyada por nadie, se le hará simple y llanamente un vacío. Un vacío político, mediático y social. ¿Motivo? Es blanca. Sí, tristemente esa es la respuesta...
Cada vez estoy más convencido de que os interesa que todas las razas de la tierra desaparezcan, que todas las culturas, -con su riqueza y biodiversidad incalculable- se mezclen por vuestros oscuros sueños etnomasoquistas.
Lo miro desde vuestra perspectiva y tiene su lógica: el ser humano que no tiene ni patria ni cultura ni raza, trabaja más, se queja menos y es más manejable.
Además, la mayoría de guerras en el pasado, han sido por motivos nacionalistas entre unas regiones y otras. Y eso queréis erradicarlo a toda costa, da igual que arraséis a toda la Humanidad.
No hay más que leer vuestros lemas: "solo una raza, la raza humana". Esa premisa es totalmente falsa, pues el ser humano pertenece a una especie dentro del mundo animal, siendo especial por su carácter racional, y con gran diversidad de razas que no se deben perder porque el sueño de unos pocos sea autodestruirnos.
A los que se les llena la boca con reivindicaciones antifascistas, no son realmente antirracistas. Son arracistas, es decir, están en contra de todas las razas y por lo tanto de la realidad intrínseca del ser humano y su diversidad biológica. Esto es una barbaridad. Una atrocidad permitida, financiada y predicada a los cuatro vientos por los gobiernos occidentales y sus medios de (des)comunicación, asociaciones politizadas con ánimo de lucro y los perro-flautas que transmiten su mensaje en las calles a punta de navaja y de forma totalmente gratuita (cosa que seguro que la globalización les agradece, pues les allana el camino quitándoles posibles enemigos, esto es, nosotros).
Para las víctimas blancas del racismo no hay indemnizaciones, no hay justicia y no hay canciones. No se reunirán 3 o 4 raperos famosos denunciando las actitudes nocivas de esas elementas que aparte de ser antisociales, deberían ser reeducadas cívicamente por el Estado, si es que quieren disfrutar de libertad en sociedad.
No irán jefes de organizaciones por los derechos humanos a ofrecer su apoyo logístico de todo tipo: ya sea judicial, económico o con asesoramientos diversos, no.
Son blancos y en esta sociedad abiertamente anti-blanca no hay lugar para ellos.
Me hubiera gustado ver qué hubiera pasado si las agresoras fuesen blancas y la víctima una negra. Algo que también sería ABSOLUTAMENTE DETESTABLE pero que en este caso, este mundo asqueroso hubiera tratado de manera muy diferente y a las agresoras las hubieran condenado a "penas ejemplares".
¡¡Qué injusticia, cuántas cosas hay que cambiar!!
Os dejamos con la noticia, a ver si la gente se empieza a concienciar de su raza, nacionalidad, identidad y cultura en pro de toda la Humanidad.
¡¡CONTRA EL RACISMO ANTI-BLANCO Y ESPECIALMENTE CONTRA EL ANTI-ESPAÑOL!!!
Rhea Page, de 22 años, y su novio Lewis Moore, de 23, esperaban un taxi en el centro de Leicester cuando apareció un grupo de africanas -tres hermanas y una prima- que empezaron a golpear a la joven al grito de “te vamos a matar, escoria blanca”. Durante el ataque, las agresoras le arrancaron a la chica grandes trozos del cuero cabelludo y le propinaron un aluvión de patadas en la cabeza, espalda, brazos y piernas hasta dejarla inconsciente en el pavimento.
Sin embargo, las cuatro mujeres de origen somalí, fueron absueltas el pasado 6 de diciembre de la agresión que perpetraron contra la chica británica tras alegar el juez que, debido a su religión, no estaban acostumbradas a beber. El Corán prohíbe a los musulmanes consumir alcohol, aunque las enseñanzas islámicas permiten su uso con fines medicinales.
Ambaro Maxamed, de 24 años; Ayan Maxamed, 28; Hibo Maxamed, 24; e Ifrah Nur, de 28, admitieron la causa inculpatoria de los hechos ocurridos en junio de 2010, lo que conllevaría una sentencia máxima de cinco años de prisión por agresión con lesiones físicas. Pero el juez, Robert Brown, no solo suspendió la sentencia de prisión condicional de seis meses alegando que las mujeres, como musulmanas, no estaban acostumbradas a emborracharse, sino que en este caso ni tan siquiera se ha tenido en cuenta el agravante de “racismo” que con tanta celeridad se aplicó hace pocos dias a la ciudadana británica Emma West, por expresar su malestar de forma inapropiada en un metro londinense:
Rhea Page calificó la resolución de “repugnante” y dijo que “la banda agresora merecía reclusión inmediata, pero no se les ha impuesto ningún castigo. El hecho de que no estuvieran acostumbradas al alcohol no es excusa. Si no podían beber no deberían estar en los bares a esas horas de la noche. Incluso cuando todas escaparon tras llegar la policía, una de ellas volvió corriendo para darme mas patadas en la cabeza. Sinceramente, creo que me agredieron solo porque no soy negra. No puedo pensar en ninguna otra razón. No dejaban de gritarme puta blanca y escoria blanca. Ellas se turnaban para tirarme al suelo y seguir pegándome. Pensé que me iban a matar”.
La víctima fué tratada de graves contusiones físicas. En ese momento trabajaba cuidando a personas autistas y con dificultades de aprendizaje, pero tuvo que abandonar su trabajo a causa del estrés y de las frecuentes crisis de ansiedad que padece desde que sufrió la brutal agresión racista, motivo por el que aún está en tratamiento psicológico.
El juez dijo que “evaluar el hecho de tirar a alguien al suelo y darle patadas en la cabeza puede esperar”, y añadió: “las mujeres pudieron haberse sentido víctimas de la fuerza irracional del señor Moore cuando trataba de defender a su novia”, lo que conllevó a la anulación de la sentencia condenatoria.
Fuente: Alerta Digital.
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